Primera película de Keith Thomas. Thomas que dejó la investigación médica para dedicarse a la escritura, ha publicado varias novelas y debuta con The Vigil (2019) en la gran pantalla, bajo el amparo de la productora de éxito Blumhouse. Una de las cosas que hay que agradecerle a esta “fábrica de terror” es su apuesta por los nuevos realizadores.
Partiendo de la base de que The Vigil juega con bastantes clichés del género (entre ellos los tan denostados “jump scares”) tiene algunas cosas por las que merece la pena darla una oportunidad.
De marcado tono religioso de la película, al menos se separa de la religión cristiana para ambientar la historia. Es un punto a su favor, puesto que así le permite explorar nuevas facetas de esta religión y su posibilidad de aplicarlas al género de terror. El resultado no está mal, aunque bien es verdad que no supone un condicionante demasiado estricto para la historia que cuenta.
Por otro lado, a pesar de no aportar demasiado al género, se interesa por los personajes y nos da cierta información sobre ellos, sobre todo acerca del protagonista (correctamente interpretado por el actor Dave Davies).
La película nos habla de la pérdida de la fe, del duelo (como si fuera el duelo tras la muerte de un ser querido) y también nos habla de como tratar de rehacer nuestra vida ante un suceso catastrófico. Todo ello queda bien reflejado y sirve como fondo para los terrores del protagonista. Y es que en el fondo, son éstos los que le atemorizan durante la noche. Esa duda es la que queda después de haber visto The Vigil. ¿Realmente ha visto y ha sufrido lo que vemos o es todo producto de sus miedos y de la pérdida de la fe?
Este planteamiento es lo más destacable de una cinta que, por lo demás, no termina de aportar mucho al género sin evitar los tan manidos clichés. Thomas (que además escribe el guión) se rodea además de una atmósfera muy aterradora, jugando mucho con la oscuridad, las sombras, las formas difusas… quizá su desenlace sea lo más llamativo.
The Vigil es una muestra de que es posible hacer un cine de terror con algo de miga, con un personaje acechado por sus miedos, por la pérdida de la fe, que se enfrenta a sí mismo para darse cuenta de en qué cree realmente. Es una película que no brilla por su ritmo sobre todo (puede hacerse lenta en algunos momentos), pero que en general está bastante bien rodada.
Sin destacar demasiado, The Vigil supone un pequeño soplo de aire al género y una pequeña perla dentro de todo lo que Blumhouse hace (que no suele ser demasiado atractivo). Es necesario aclarar que si alguien espera una cinta con criaturas y monstruos, ésta no es su película.