Cuando acecha la maldad

Cuando acecha la maldad

Cuando acecha la maldad | 2023
23 de enero de 2024
Durante la noche, dos hermanos escuchan varios disparos. Por la mañana, descubren el cadavez destrozado de un hombre. La investigación les lleva hasta una casa en donde parece ser que se encuentra un hombre poseído. A partir de entonces, empezará una huida tratando de evitar el mal a toda costa a la vez que intentan encontrar su origen para terminar con él.

A Demián Rugna (Buenos Aires, 1979) no lo conocemos demasiado. Quizá no sea un director de los muchos que trabajan para Blumhouse, pero su cine muestra sin temores la crudeza y la brutalidad del terror sin, prácticamente, miramientos. Suele mezclar a partes iguales cotidianidad y horror, siempre en un equilibrio justo, aunque nunca pierde el elemento fantástico de la historia. Lo demostró en Aterrados (2017) ya ahora vuelve a la carga con Cuando acecha la maldad (2023), una cinta con una calidad notable.

A grandes rasgos podemos decir que la película es una enorme montaña rusa que, a pesar de tener un arranque y casi sesenta minutos de tensión bastante interesantes, se va desinflando poco a poco, terminando en un final un tanto atropellado, al que le cuesta mantener mucho el ritmo. Aún con esta pequeña pega, la película es sumamente disfrutable, además de tener un nivel técnico muy alto.

Su planteamiento es sumamente sencillo, Rugna, que de nuevo se encarga de escribir el guion, configura la trama como si la gente poseída (“embichados” o “encarnados”, como se les llama en la película) estuviera entre los ciudadanos normales. El problema se plantea, en la película de hecho arranca así, cuando esto le toca a uno de cerca, cuando tu vecino o vecina se vuelve uno de ellos. Tras pasar por una serie de vicisitudes, el dúo protagonista (los hermanos Pedro y Jaime) encuentra lo que parece ser el origen del mal, todo ello envuelto en un enrarecido ambiente que genera constantemente un desasosiego al espectador muy, muy interesante.

Demián Salomón y Ezequiel Rodríguez.

Y es que uno de los puntos más fuertes de la película es precisamente su atmósfera. Casi emparentada con el ‘folk horror’, los escenarios donde se desarrolla la cinta forman parte de esa sensación de absoluta soledad, de absoluta dejadez. Casas casi abandonadas en donde habita gente, habitaciones avejentadas, baños desgastados, coches viejos… todo rezuma tiempo en la película, un tiempo que ya ha desgastado a los personajes y que parece seguir haciéndolo.

Ezequiel Rodríguez encarna al protagonista, un hombre sin fe, con un pasado turbio que poco a poco vamos conociendo y que no duda en enfrentarse a lo que sea con tal de salvar a los suyos. Junto a él su hermano, el actor Demián Salomón (es su tercer trabajo con Rugna) que parece equilibrar la ¿locura? de su hermano, en un papel tan secundario como importante. Las interpretaciones, en general están correctas a pesar de que no terminan de conmover o de despertar demasiado interés.

No hay duda de que Cuando acecha la maldad es una cinta más visual que dramática (aunque tiene sus puntos dramáticos). Rugna se muestra absolutamente brutal a la hora de mostrar la violencia, siempre que puede basándose en unos efectos prácticos muy notables. Hay mucha violencia, alguna de ella que roza casi el ‘gore’ y posiblemente algunos estómagos se resientan un poco.

Luis Ziembrowski.

Pero no es tan redonda si nos ponemos a pensar un poco más en su guion, posiblemente lo menos fino de la propuesta. A pesar de tratar de crear una especie de universo propio (con el tema de los poseídos, las normas para combatirlo, la anciana con sus trastos…) hay muchas cosas que no terminan de explicarse correctamente. Por eso su desenlace final puede resultar un tanto atropellado y con demasiadas lagunas. Es difícil mantener el arrollador ritmo de la primera hora y aunque Rugna se esfuerza lo que no está escrito, no termina de rematar todo como es debido y la película acaba cayendo en numerosas cosas.

No obstante, y a pesar de todas las cosas que no funcionan, Cuando acecha la maldad es una más que notable propuesta, un ejemplo que incluso Hollywood debería echarle un buen ojo. Con su pequeño presupuesto y las enormes ganas que su director le echa siempre, cualquier trabajo de Rugna merece una oportunidad, y ésta película no es menos.

Demián Rugna deslumbra con "Cuando acecha la maldad", un terror crudo y realista.
7

+Info
Dirección
Demián Rugna
Guion
Demián Rugna
Dirección de fotografía
Mariano Suárez
Música
Pablo Fuu
Montaje
Lionel Cornistein
Formato
2.39:1
Nacionalidad
Argentina, USA
Duración
99 minutos
Distribución
SelectaVisión
En la red

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