Espacio cinematográfico

El espacio tomado con seriedad en 5 películas
Cintas alejadas de secuencas épicas, rayos láser, planetas imaginarios...
26 de octubre de 2013

El estreno de la película de Alfonso Cuarón, Gravity, nos ha hecho recordar que el espacio ha sido en otras ocasiones, un personaje más dentro de una historia. Gravity nos ha vuelto a mandar al espacio de una forma realista, teniendo en cuenta detalles que, quizá, otras producciones de ciencia ficción ignoran (la mayoría de las veces de forma deliberada). Con ello, Gravity se ha hecho un hueco no ya sólo en el género, sino como una de las cintas más vistas del año y una película prácticamente imprescindible.

Por esto, hemos querido hacer un pequeño repaso de, al menos, cinco títulos que se han tomado en serio eso del «espacio exterior”. Algunas han apostado más por lo espectacular que por la historia, otras quizá no han sido tan sumamente detallistas y realistas, pero todas ellas tienen en común la inmensidad y la oscuridad de eso que llamamos espacio.

2001: Una odisea del espacio 2001: a space odyssey

La obsesión por la perfección que Stanley Kubrick tuvo a lo largo de toda su carrera, hasta su muerte en 1999, también impregnó a esta película, basada en una novela del británico Arthur C. Clarke, y que presenta a una raza alienígena capaz de crear vida inteligente a lo largo de la galaxia y a través de un gigantesco monolito (de cristal translúcido, negro en la película). Con esta idea, Kubrick y él mismo, escribieron lo que sería el guión de la película, una de las más realistas sobre el espacio exterior que jamás se hayan realizado.

La compleja producción de la película tenía como objetivo hacer lo más creíble para el espectador, la idea del espacio exterior y de cómo se viviría en él. Hasta la fecha pocos datos había, salvo toda la información que se pudo recopilar de los viajes espaciales de la NASA, entre ellos el del Apolo XI, la primera nave tripulada que pisaba la superficie lunar. Para el equipo de producción de la película, cualquier fuente real les servía como inspiración.

2001: una odisea del espacio (Stanley Kubrick, 1968).

El espacio como protagonista dentro de 2001: Una odisea del espacio es quizá algo complejo de explicar, puesto que realmente es más un “transporte” de la historia que un personaje en sí mismo. Pero con todo y con eso, si nos referimos más a la parte técnica que a la narrativa, pocas pegas se le pueden poner a la película. Inmensos decorados, formas muy limpias, el uso del blanco como color principal para la mayoría de decorados, una iluminación suave pero que se hacía notar… elementos que confirieron a la cinta un aire que, incluso hoy en día, sigue suponiendo una fuente de inspiración para muchos títulos.

Evidentemente 2001: Una odisea del espacio es mucho más que unos simples decorados realistas, es quizá una de las películas más complejas que se han realizado y por ello una gran parte de los aficionados al género de la ciencia ficción no la tienen entre sus preferencias. No hay que olvidar también al enigmático HAL (con la hipnótica voz de Douglas Rain en su versión original), uno de los ordenadores más terroríficos que ha dado el cine, y sin duda otro protagonista más. Su supuesta continuación, 2010: Odisea Dos (Peter Hyams, 1984) no llega a la misma complejidad y técnica, desgraciadamente.

¿Cómo se puede ver? 2001: una odisea en el espacio está editada tanto en DVD como en ‘bluray’ y en Ultra-HD por Warner Home Video.

Apolo 13 Apollo 13

Y habría que saltar 17 años para volver a encontrarnos con una cinta ambientada en el espacio y que además se lo tomaba en serio. Ron Howard quedó impresionado cuando leyó el libro “Lost Moon”, escrito por el astronauta Jim Lovell (Tom Hanks en la película) y en donde relataba la odisea que él y su tripulación (Fred Haise (que enfermó durante el viaje) y Jack Swigert) vivieron cuando en la travesía del Apolo XIII (viaje que, supuestamente iba a tocar la superficie lunar) sufrieron un accidente que los dejó casi sin oxígeno. Con la ayuda de los científicos de la NASA, lograron hacer volver a la nave a la Tierra y salvar a toda su tripulación.

El heroísmo de la historia y la seriedad con la que tanto Howard como Brian Grazer (dueño de la Imagine Entertainment) requerían un estilo realista y sólido para la película. La película se cuenta desde dos espacios diferentes, por un lado la Tierra y por otro lado el exterior, en donde Lovell intenta sobrevivir. El equipo de producción logró utilizar los aviones de pruebas de la NASA para rodar las escenas sin gravedad, lo que les reducía las tomas a poco más de 20 segundos.

Apolo 13 (Ron Howard, 1995).

Apolo 13 contaba con unos efectos especiales sorprendentes y las escenas en donde las imágenes CGI tomaban protagonismo, eran simplemente espectaculares, tanto que consiguió 9 nominaciones a los Oscar y 2 estatuillas (Mejor Sonido y Mejor Montaje), además de una treintena de nominaciones más a otros premios. El esfuerzo por reconstruir con realismo el espacio de la nave y la propia nave, fueron cruciales a la hora de recrear la historia.

Tanto se involucró Tom Hanks, que su interés por la exploración del espacio le llevó a producir la mini serie de la HBO De la Tierra a la Luna, un intenso repaso en 12 episodios sobre todo el programa Apolo. El propio Hanks se encargaba de introducir cada episodio y además dirigió 4 de ellos. Nombres como Gary Fleder, Graham Yost, Frank Marshall, Jonathan Mostow o Jon Turtletaub figuraban en los créditos de la dirección de algunos episodios.

¿Cómo se puede ver? Apolo 13 está editada en DVD, ‘bluray’ y Ultra-HD, por Universal.

Misión a Marte Mission to Mars

Un por aquel entonces poco conocido Gore Verbinski se había interesado por un guión de los hermanos Jim y John Thomas en donde se abordaba una misión espacial a Marte en buscar de una misteriosa señal. Años después de que el planeta rojo recibiese su primer visitante, un equipo de rescate se lanza a buscarlos.

Aunque la película parece tomarse en serio, casi continuamente, lo cierto es que el resultado desluce bastante. Quizá el abandono de Verbinski, la reescritura del guión por parte de Graham Yost, y que Brian De Palma se hizo con el proyecto finalmente, no ayudaron a establecer unas bases sólidas y realistas a la película. Aún así, la labor de producción es bastante aceptable, quizá la más floja de todas las que estamos viendo.

Misión a Marte (Brian De Palma, 2000).

El reparto de Misión a Marte tampoco ayudó mucho, realmente no había actores con un peso como para atraer en masa al público, y hasta el guión se permitía escenas un tanto vergonzosas (como ese baile en gravedad cero). El espacio no tenía mucho protagonismo, pero sí que estaba bastante bien conseguida la sensación, a pesar de que los protagonistas no salían demasiado al exterior.

Si la Touchstone (o lo que era lo mismo, la Disney) había estrenado Misión a Marte, Warner Bros. hacía lo propio con Planeta Rojo (Antony Hoffman, 2000), que a pesar de estar ambientada en el mismo planeta, no se tomaba muy en serio todo y la historia quedaba más próxima a la ciencia ficción/acción que a lo que realmente le interesaba a Misión a Marte.

¿Cómo se puede ver? Misión a Marte está editada en DVD por Sony.

Sunshine Sunshine

El cine menos profundo también se ha hecho eco de la importancia y relevancia del espacio como personaje. Si Misión a Marte (2000) hizo lo suyo, la Fox también tenía su as en la manga para una cinta ambientada en el espacio exterior. Tendrían que ser necesarios siete años y más de treinta reescrituras de guión para que el proyecto Sunshine viera la luz. Una cinta que, a pesar de su naturaleza científica (la premisa de la historia se basa en algunos elementos reales del Sol), apostaba más por la acción que por otra cosa. Pero si que es verdad que Danny Boyle le consiguió dar su toque personal, sobre todo a los personajes, todos ellos muy bien definidos y con un carisma propio. Quizá sea una de sus cintas más interesantes, pero a la vez una de las menos consideradas.

En un futuro, el Sol se está apagando y para reactivarlo se crea un grupo de científicos especializados de todo el mundo que, a bordo de la nave Icarus lanzarán una potente carga atómica contra el astro rey para volverlo a «poner en marcha». Durante el viaje surgen los problemas, rencillas y situaciones que pondrán a prueba no sólo la misión, sino también a cada uno de ellos. ¿Estarán dispuestos a jugarse la vida para salvar a la humanidad?

Sunshine (Danny Boyle, 2007).

El tratamiento del espacio dentro de Sunshine también roza lo real, si podemos decirlo así. La mayoría de las escenas rodadas en el exterior de la nave recrean con bastante solvencia el espacio que les rodea, pero siendo una película más próxima a una superproducción de acción que a otra cosa, hay algunos elementos que no resultan del todo creíbles, como por ejemplo, el generador de gravedad de la nave. Pero en cambio hay otros que son bastante creíbles, sobre todo los relacionados con las escenas en las que los actores se exponen a las radiaciones solares. Boyle se ha caracterizado por ser bastante realista en su cine y Sunshine, no se aleja en exceso.

El variado reparto de la película también hace posible que su conjunto no desluzca para nada. Eso sí, la incursión en el tramo final de varias secuencias absolutamente fuera de toda lógica, es quizá lo que la confiera ese toque de «superproducción» que muchos quizá no aguanten. Pero hasta esos momentos, la película es bastante aceptable. Especial mención para la fotografía de Alwin Küchler.

¿Cómo se puede ver? Sunshine está disponible tanto en DVD como en ‘bluray’, editado por Fox Home Entertainment.

Moon Moon

Hasta no hace mucho, la cinta del hijo de David Bowie, Duncan Jones, figuraba entre las que mejor han recreado la sensación del espacio exterior. Jones se esforzó al máximo en el que era su primer largometraje y, el resultado no deja indiferente. Tomando como referencia títulos como 2001: Una odisea del espacio (Stanley Kubrick, 1968) e incluso Alien, el octavo pasajero (Ridley Scott, 1979), las recreaciones de la estación lunar son realmente sorprendentes, logrando transmitir la sensación que se buscaba. Esa mezcla entre lo aséptico, lo limpio, lo minimalista… todo confluía en la espléndida producción de Moon.

La historia quizá no tenía al espacio como un protagonista absoluto, pero si servía de vehículo para contarnos como el joven Sam Bell (un espléndido Sam Rockwell, como de costumbre) lleva años en una base lunar. Allí desarrolla todo su trabajo, a la vez que intenta mantener una vida más o menos «terrestre». Pero un día Bell descubre algo extraordinario, justo el mismo día que debe volver a la Tierra.

Moon (Duncan Jones, 2009).

Dejando a un lado la historia de la película, Moon es un bonito ejercicio visual que nos demuestra que a veces no es necesario contar con un millonario presupuesto para tener una buena ambientación. Y es que las escenas y secuencias rodadas a «campo abierto» en la superficie de la Luna son simplemente geniales. Una cinta que casi era obligatorio ver en una pantalla grande, mostraba una buena dirección artística así como una sobria pero efectiva fotografía (de Gary Shaw).

Su buena técnica le valió cuatro premios (película, actor, diseño de producción y guión) en el Festival de Sitges, donde se presentó en España con un interés especial (no sólo que Jones era el hijo de quien era), sobre todo por que la cinta contaba prácticamente con un sólo protagonista, algo que comparte en cierta forma con la cinta de Cuarón, Gravity.

¿Cómo se pueder ver? Moon está editada en DVD y ‘bluray’ por Sony.

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